martes, 19 de junio de 2012

FELIPE LARA ( 20 ) Seguiriya

21
CURSO:
ORIGEN Y EVOLUCIÓN DEL FLAMENCO

   

Por Felipe Lara 

Colaboración musical: 
Felipe Gértrudix y Manuel Gértrudix







Siguiriya      

    Un hombre sentado a la puerta de su casa, está cantando con la pechera de su camisa abierta mientras alza las manos y brazos hacia arriba clamando al cielo. A su lado, un guitarrista le acompaña tocando al triste son de las campanas de la iglesia. Un cortejo fúnebre acaba de salir de la casa del cantaor y se aleja por la calle.

 


     Rompe el silencio el grito del hombre herido por su destino. Exclama los más profundos sentimientos, pura tragedia: la de ser un hombre capaz de sentir en su máxima intensidad el amor y desamor, la pérdida de un ser querido con el desgarro y estremecedor lamento de su cante. Allí va un cortejo fúnebre, ¿escuchas cómo le siguen los tristes lamentos, el abatido tañido de las campanadas, el rezo sordo de la siguiriya?

    El acompañamiento instrumental más adecuado al trágico escenario natural de la siguiriya es el de la guitarra. Lo hace de forma solemne y difícil compás, recordando en muchos pasajes musicales el doblar de campanas. Posiblemente, derivado de sus reminiscencias originarias de las antiguas tonás que las  plañideras cantaban en los entierros.

    En el baile se combinan pasos de punteado con desplantes de fuertes redobles incluyendo la escobilla en la parte media del baile. El paso fundamental consiste  en un andar rítmico, con golpes secos, sonoros y cortados, avanzando y retrocediendo el bailaor sobre el mismo sitio. Pueden bailarla indistintamente hombres y mujeres.




AUDIO
"No te puedo querer"
Seguiriya al estilo de 
Diego El Marrurro.
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Letra y cante: FELIPE LARA
Guitarra: Félix de Utrera.
Grabación de 1.971   


   

     Melódicamente la siguiriya comienza con un quejido muy profundo y lastimero para entrar en los primeros tercios, algunos de ellos redoblados, culminar en el tercero, largo de métrica y música, y caer verticalmente en el cuarto, otra vez más corto.
El ámbito es de 7ª (Sol2-Fa3).
El ritmo es producto de una combinación de compases binarios y ternarios, que origina un tiempo de cinco pulsos, dos largos y tres cortos.
Armonía: Cadencia andaluza transportada a La.
La estructura depende del texto. Habrá tantas secciones como versos se canten, y éstas se distinguen por el tipo de cadencia: semicadencia o conclusiva.

    Todas las melodías están basadas en la ornamentación con melismas de dos notas: una que hace la función de tónica final y otra que tiene el puesto de dominante sobre la que se canta prácticamente el texto.                          

Métrica Literaria
Seguidilla. Estrofa de cuatro versos, heptasílabos los impares y pentasílabos los pares. La rima suele ser asonante en los versos pares, quedando libres los impares.





SIGUIRIYA DEL MARRURRO

     Diego El Marrurro, cuyo nombre de pila era el de Diego López, nació y vivió en Jerez de la Frontera en el siglo XIX.  Fue uno de los más importantes cantaores de su tiempo, creador de varios estilos como: Tonás, tangos, tientos, etc, pero se significó con sello muy especial por suiguiriyas.

NO TE PUEO QUERE
“siguiriyas del Marrurro”

Ay, me pies que te quiera;
no te pueo queré,
porque tu eres una gitana mu mala,
válgame un Divé.

Cuando te vi yo aquél día,
yo me eché a llorá;
me daba cuenta que tú por mi tenías
poca voluntá.



Enlaces


*****

Mal fin tenga este sueño
que tanto he dormío;
se han llevao a la mare de mi alma
y no lo he sentío.

Seguiriya popular

1 comentario:

América dijo...

Bellísimo articulo maestro, las ilustraciones son absolutamente hermosas también, ¡qué bella manera de aprender!La serie sigue siendo de antología.
Saludos flamencos.