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CURSO:
ORIGEN Y EVOLUCIÓN DEL FLAMENCO
Por Felipe Lara
Colaboración musical:
Felipe Gértrudix y Manuel Gértrudix
Soleá de Triana
La soleá es
uno de los ritmos básicos de nuestro cante, que admite infinidad de temas:
hechos políticos, sentimientos amorosos, episodios de tipo cómico, etc. La
soleá abre su propia escuela flamenca a finales del siglo XVIII, de manera
reducida, a los centros sevillanos de Alcalá, Utrera y Triana. Los maestros de
este cante fueron numerosos, desde “La Andonda” hasta Chacón, pasando por “el
Fillo”, Silverio, Joaquín “el de la Paula”, Paquirri, etc.
Pierde
claridad el día y se encienden los faroles del barrio de Triana. Cesa la
actividad portuaria y el Guadalquivir desliza silenciosas sus aguas porque
quiere ser testigo mudo de la grandeza que entraña la soleá de Triana en la voz
y la guitarra. Hasta
el viento está en calma por seguirle el aire al cante, al compás de la sonanta,
y una media luna clara se refleja en aguas mansas, un universo de estrellas que
quieren acompañarla. Avanzan las horas nocturnas, y la reunión de cabales, con
el son metido en las venas, no quiere perder el ritmo de una noche inolvidable.
Mirando a
Sevilla con el Guadalquivir por medio, desde el bar El Puerto de Triana, una
juerga de tronío enmudece el paso de los vapores y silencia el sonar de las
campanas. Enfrente, la Torre
del Oro, solemne, baila delante de la Maestranza una soleá de Triana que, al compás de
la guitarra, vuela surcando los vientos. Los sevillanos escuchan y, con ellos,
la Giralda quisiera cruzar el puente para abrazar a Triana, que tanto arte
derrocha de San Jacinto a La O, de Los Remedios a Santana.
AUDIO
"Hablé con el corazón"
Soleá de Triana.
Cante y letra: FELIPE LARA
Guitarra: Félix de Utrera
Grabación de 1.971
Soleá
de Triana: de soledad, y éste del
latín solitas, -atis. Cante propio
del barrio al que representa.
La soleá
procede de la combinación de compases binarios y ternarios que produce un ritmo
de 12 pulsos simétricos, de los que se acentúan el 3, 6, 8 y 10 y quedan en
silencio los pulsos 11 y 12.
Tercetos
y cuartetas.
En la
estructura métrica de las soleares es destacable su capacidad de síntesis, lo
que las acerca, en este sentido, a los refranes. Hay una clara inclinación para
expresar el amor y desamor de los humanos.
Y TE DARE LA RAZÓN
“soleá grande de Triana”
Cuéntame tú a mí el motivo
y te daré la razón,
si la culpita yo tengo
yo a ti te pío perdón.
HABLÉ CON MI CORAZÓN
“soleá de Triana”
Ay, me dijeron a mí,
que yo en tu fuente no beba,
porque me pueo morí.
Hablé con mi corazón,
mi corazón dijo sí.
En Jerez: la seguiriya
y en Córdoba: la serrana.
En Sevilla que es la cuna:
la soleá de Triana.
Soleá de J. Carrasco grabada por El Cabrero.
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