MANUEL GARCÍA HERNÁNDEZ

El   "amigo" Manolo

 

Hace ya quince años que vivo en Cáceres. A los  pocos años de estar aquí y tomando una cerveza con un colega de la petanca (mi otra afición) un señor que estaba a nuestro lado nos oyó hablar de flamenco. Era Manuel Carrillo, taxista de Puebla de Obando (Badajoz), aficionado que se unió a la conversación ya que conocía a mi compañero de tertulia. Al cabo de un rato de charla dijo sin más: 

--Aquí en Cáceres, uno de los que más sabe de flamenco es mi amigo Manolo.  Y además es una gran persona. 

    Me dio su teléfono y me aseguró, por lo que habíamos estado hablando, que ambos nos alegraríamos de  conocernos y no tardé mucho en llamarlo. Me invitó a su casa y me recibió como si me conociera de toda la vida.  Me ofreció lo mucho que tenía sobre libros, discos, casetes, vídeos,  etc.  y que todo estaba a mi disposición.

   El resto de la historia se concreta en una sincera y afectiva amistad desde que nos conocimos hace ya más de diez años.  En Cáceres, en el ambiente flamenco, es conocido por todos los profesionales y aficionados y no son pocos los que le piden tal o cual cante de éste o aquel cantaor en la seguridad de que si él no lo tiene no les va a resultar fácil encontrarlo por aquí.

  Hacía ya tiempo que quería publicar una entrevista con él  y aquí está por fin. En su casa,  junto a sus muchos recuerdos (todos hechos por él mismo con su habilidad natural)  y su abundante discografía,   nos contestó con su habitual sencillez, humildad y sabiduría.

  Y la primera pregunta, copia de mi amiga Ramona y su blog LA GACETA FLAMENCA que lo hace mucho mejor que yo:

--¿Qué es para ti el flamenco, Manolo?
--El flamenco para mí es un arte. Un arte en el que intervienen muchos factores como garganta, pulmones, voz, afinación, medida, compás, resistencia, etc.  De ahí la dificultad de su interpretación; por eso hay tan pocos cantaores y cantaoras buenos.

--Manolo habla del cante porque sé que es lo que a él le gusta especialmente. ¿Cuál ha sido tu formación académica?
--Mi formación académica ha sido cero. Yo nací en el campo y me crié en el campo. Estuve en Pedroso de Acim (Cáceres) el invierno de 1.939 - 1.940 y asistí a la escuela los meses de noviembre, diciembre, enero y febrero. A partir de esa fecha volví al campo. Desde entonces estuve trabajando en una huerta hasta que me incorporé al servicio militar. Al licenciarme me marché a Bilbao donde  aprendí el oficio de carpintero encofrador, oficio que he tenido hasta mi jubilación.

--La verdad que cuatro meses en una escuela de aquellos años no debieron de dar para mucho; así que puede decirse que te formaste tú solo y de forma autodidacta como Antonio Mairena, por ejemplo. Ya sabes lo que decía Rancapino: "El flamenco se escribe con faltas de ortografía".  ¿Cómo entraste en el flamenco?  ¿Cómo comenzó tu afición al cante?
--Mi afición al flamenco nació conmigo; lo traía en los genes. Vengo de una familia muy flamenca: mi abuela paterna, mi padre, una hermana y un hermano de mi padre cantaban muy bien. Desgraciadamente yo  no canto ya que sólo heredé la afición.

--Pero seguro que te acuerdas del primer disco que compraste, ¿no?
--Pues sí. Mi primer disco fue un EP de 45 r.p.m de Manuel Vallejo  allá por el año 1.961. No tenía dinero para comprar un tocadiscos pero sí tenía intención y ganas de hacerlo. Cuando veía un disco que me gustaba lo compraba y no los escuché hasta que pude comprarme un pick-up. Cuando la vida fue mejorando económicamente me fue entrando el síndrome de coleccionar flamenco y compraba casi todo lo que veía y así sigo todavía.

AUDIO

"A mí me mata la pena"

Granadinas ( E. Mezquita)

Guitarra: Niño Ricardo

--Doy fe de ello porque Manolo comparte todo lo que tiene con sus amigos, yo entre ellos, Le encanta intercambiar discos y cantes como si fueran cromos. Y cambiando de tema: ¿Cómo ves el flamenco aquí en Cáceres? ¿Hay un presente? ¿Tenemos un futuro esperanzador?
--Yo veo un poco flojo el flamenco en Cáceres. No hay una gran cantidad de seguidores y siempre somos los mismos los que nos vemos en las actuaciones. Se difunde poco y,  quizás, si la gente oyera más flamenco entraría más en él. En mi modesta opinión hay poca ayuda por parte de las instituciones y es una lástima. Una música tan nuestra y tan importante y que no tenga la ayuda que yo creo que se merece. El futuro no lo veo muy halagüeño porque lo que si abunda son esas nuevas músicas que las llaman flamenco pop, flamenquito, fusiones, etc. Eso hay que venderlo con otro nombre porque si no lo que hace es más daño que otra cosa al flamenco.  
  Otro cosa ha sido los buenos aficionados con facultades para cantar bien como por ejemplo el Niño de Alcántara, Manolo Villarroel, Nacarino, Gaona, Polino, Tío Luis "El Blanqueaor" y otros muchos  entre los más antiguos y de los que no hay grabaciones. En otra etapa posterior, cuando ya se podrían registrar sus cantes, hay que hablar de Diego de Cáceres, Victoriano Blanco El Vivi, el Niño de la Pizarra y si los quisiéramos nombrar a todos sería una lista interminable.  Entre los mayores, y  dedicado al cante profesionalmente, hay que acordarse de El Niño de la Ribera que todavía está en activo.  Hay una juventud muy prometedora. A excepción de la Doctora en Flamencología y estupenda cantaora e investigadora que es Raquel Cantero, no quiero nombrar a nadie más para no caer en falta con el resto de todos los que admiro.

AUDIO
"Le dijo la azucena"
Guajiras
DIEGO DE CÁCERES
Grabación casera realizada, en directo,  
en una reunión de amigos

--¿Te consideras un aficionado ortodoxo o de los llamados puristas?
--Yo lo que digo es que no engañen a la gente falsificando el flamenco. Todo el mundo tiene derecho a crear lo que le salga de su imaginación; pero que le pongan otro nombre y que no engañen a la nadie.

--Dices que hay poca afición o pocos seguidores en Cáceres. ¿Cómo explicas entonces que haya nada menos que tres peñas flamencas en una ciudad relativamente pequeña y fuera de Andalucía?
--Lo de las tres peñas no creo que tenga nada que ver con el número de seguidores ni con la afición. Más bien creo que es por falta de unión. Si se juntaran en una sola peña sería mucho más viable porque tendría más socios para aportar fondos y se podrían hacer más actividades y con más participantes en ellas.

--He visto en el salón de tu casa más de diez trofeos-recuerdos de tu participación como miembro del jurado en el Concurso de Cante de Plasencia. ¿Cómo se lleva eso de tener que decidir quien ha sido el que mejor lo ha hecho en esa noche?

--La labor de jurado en un concurso es muy ingrata y muy delicada. Tienes que estar muy pendiente de todos los detalles para no perjudicar a nadie. Hay que valorar los cantes por la manera de interpretarlos a la perfección más aproximada  a su pureza y teniendo en cuenta la personalidad de cada participante; pero sin fijarse en su nombre o posible fama.

AUDIO
"El paño fino en la tienda"
Tanda-lección de Soleares
Cante. NIÑO DE LA RIBERA
Guitarra: El Mami
Actuación en directo en la 
Peña "Chaquetón" (Madrid)
el día 6 de febrero de 1.996,
cuando nuestro amigo Simón
tenía la voz en su punto para 
este tipo de cante y con unos
aficionados entregados.

--También sé que no te perdías ni uno solo de aquellos Congresos de Arte Flamenco que dejaron de celebrarse. ¿Cual fue la causa, en tu opinión, de que se abandonaran de  repente?
--El montar un congreso debe costar mucho dinero. Supongo que fallaría la economía o que no saldrían las cuentas. Yo no me preocupaba de eso. Lo que me gustaba era asistir y escuchar a gente que había investigado y te enterabas de muchas cosas nuevas. Aunque también había quien metía la pata como suele decirse.

--Otra curiosidad: ¿Cuál ha sido el último disco que has añadido a tu colección?
-- Ha sido "Arqueología del Flamenco" de FELIPE LARA. Este cantaor, de Don Benito (Badajoz), siempre me ha gustado mucho y compré en Santurce (Vizcaya) su primer disco cuando se llamaba "FELIPE EL EXTREMEÑO"

AUDIO

"Almería quien te viera"

Taranto y murciana

Cante: FELIPE LARA

Guitarra: Carlos Pardillo

Disco EP 45 rpm de Columbia

--Bueno Manolo. Charlar contigo siempre es un placer y siempre aprende uno algo. Pero si hacemos esto más largo no la va a leer nadie. Así que gracias por tu colaboración, por tus sinceras y comedidas opiniones, por tu sabiduría flamenca y sobre todo gracias por tu amistad.


  Me satisface enormemente y de todo corazón haber podido rendir este modesto homenaje al amigo Manolo y ojalá haya conseguido presentarles con objetivad y acierto, como él se merece,  a este buen entendido, gran aficionado y mejor persona.

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El día que yo me entere
que me tengo que morir
tiro una manta en el suelo
y me jarto de dormir.

Soleá de Ramón El Ollero