Curro Montoya Egea, más conocido como El Niño de la Huerta (Lora del Río, 1.907 - 1.964) se habría quedado en uno de los muchos imitadores de Pepe Marchena de no haber sido por "La Romería Loreña", vidalita que le catapultó a la fama.
Se cuenta que una da las múltiples veces en que la interpretó, encontrándose a gusto y con un público entregado, repetió el estrebillo más veces de lo debido. Don Ramón Montoya, el guitarrista que lo acompañaba, al terminar el cante le preguntó con sorna:
--¿Cuántas romerías hay en tu pueblo, Curro?
--Sólo una: la de la Virgen de la Setefilla. ¿Por qué lo pregunta, maestro?
--Porque me ha parecido que por lo menos debía de haber cuatro o cinco. Como quieras grabarla en un disco vas a necesitar una era de tu pueblo.
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Yo en mi corazón tenía
la espina del desengaño.
Pero llegó cierto día
y pude arrancarme sin daño
lo que tanto me dolía
Yo en mi corazón tenía
la espina del desengaño.
Pero llegó cierto día
y pude arrancarme sin daño
lo que tanto me dolía
Fandango del Niño de la Huerta
Amenísimo maestro. ¡Cómo aprendo contigo! Me encantan las informaciones, las anécdotas, y sobre todo las coplillas seleccionadas.
ResponderEliminarSalud.